Por: Dra. Rose Nina, PhD.
Se
sabe que la medicina basada en evidencia (MBE) es nuestro paradigma medico a
seguir ante todo paciente que presente una enfermedad física o mental. El
objetivo primordial es que la actividad médica cotidiana se fundamente en datos
científicos, No se toma en cuenta las suposiciones o creencias, ni la intuición, ni apreciaciones subjetivas, ni
experiencias clínicas no sistematizadas.
Se sabe que la violencia se ha descrito en los trastornos
mentales que abarca el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales,
(clasificación norteamericana de los trastornos mentales) por ejemplo: trastornos
esquizofrénicos, trastornos relacionados con sustancias, trastornos de la personalidad,
trastorno explosivo intermitente, episodios maníacos y la violencia contra la
mujer, clasificada como violencia contra el adulto.
Se sabe que en el año 2013 la Organización Mundial
de la Salud declaró la violencia contra
la mujer como Epidemia, según el texto original: La violencia contra la mujer es
un problema de salud mundial que alcanza proporciones de epidemia y enfatiza
que todos los trabajadores de la salud, cada uno en su lugar de trabajo deben
ser entrenados en reconocer y dar una respuesta apropiada en estas mujeres en
riesgo.
Se sabe, basado en evidencias científicas, que
el hombre maltratador presenta diferencias genéticas individuales que regulan
su respuesta conductual agresiva ante los factores ambientales. Además de cambios en su cerebro;
incluyendo la serotonina cerebral que por mecanismos genéticos responde
con la agresividad. Esto quiere decir, que este ser humano
maltratador ha heredado genes responsables de su conducta violenta y depende
del ambiente (si es o no violento) en
que viva desarrollará o no estos genes
específicos de su conducta agresiva. Se sabe, que tomando en cuenta todo estos factores: biológicos (genes), psicológicos
(personalidad) y sociales (ambiente), se
puede modular, controlar y enseñar a la
sociedad nuevos paradigmas educativos, legales
y psicosociales para que sea menos violenta y en las nuevas generaciones no
existan ni víctimas, ni victimarios.
Se sabe expresado por Leonare Walker,
experta norteamericana en este tema del maltrato a la mujer, que los tratamientos psicoterapéuticos desarrollados hasta hoy día para los maltratadores han mostrado en gran parte ser ineficaces. En tales tratamientos, no se toman
en cuenta todos las causas multifactoriales.
Es decir no solo los aspectos psicosociales, sino los neurobiológicos. De forma
objetiva, las mismas evidencias
científicas han demostrado que sus conductas agresivas han demostrado hacer
daño tanto físico, psicológico y hasta la muerte de las mujeres. Demostrado en estadísticas que el 99% de
los maltratadores ¡NO CAMBIAN!
Se sabe también, que desde el 2014
Omega se ha visto envuelto en varios asuntos legales que tienen que ver con
violencia de género, por los que ha cumplido coerciones en las cárceles de San
Cristóbal y San Pedro de Macorís, incumplimientos de contrato y hasta ha sido
declarado en rebeldía por la justicia en otras ocasiones. Los líos del artista
iniciaron en 2008, cuando un empresario solicitó ante un juez del
distrito judicial de Santiago declararlo en rebeldía por la supuesta estafa de
960 mil pesos. Se recuerda que fue hallado culpable de cometer
violencia intrafamiliar en perjuicio de su ex pareja, mediante la sentencia no.
249-02-2016 dictada por el Primer Tribunal Colegiado en fecha 13 de septiembre
del 2016. El juez de la ejecución de la pena del Distrito Nacional, Elías
Santini, acogió la solicitud de la Fiscalía y ordenó la revocación de la
pena suspendida, consistente en 5 años de prisión, contra intérprete de música
urbana Antonio Peter de la Rosa (Omega) por incumplimiento de las medidas
impuesta por el Primer Tribunal Colegiado al ser condenado por violencia de
género en perjuicio de su ex pareja.
En resumen; si se sabe que tanto el maltratador
como la victima son trastornos psiquiátricos diagnosticados por la medicina basada en evidencia. Entonces lo que expresó la actriz Cheddy García solicitando la liberación de Omega
es basado en suposiciones y apreciaciones subjetivas. Pero lo que SI SE SABE
POR LA MEDICINA BASADA EN EVIDENCIA Y
LOS HECHOS que Omega es un hombre maltratador y seguirá
maltratando.
0 comments: